Ubicado en el medio del entorno natural de la selva Iryapú, en la provincia de Misiones, La Cantera se incorpora al contexto como piezas individuales del paisaje, levitando sobre un suelo de cultura y riqueza. Entre caña fistol y palo rosa, recorriendo senderos de profunda vegetación, las cabañas se asoman a través de su albura y vetas pronunciadas. La madera se destaca entre líneas horizontales entrantes y salientes, que entrelazan el paisaje. Su textura fina y homogénea, junto a su aroma pronunciado mimetizan a las piezas dentro del ecosistema.
El desafío del proyecto consistió en minimizar el impacto en el medio ambiente durante la construcción y su posterior uso, de forma de invitar a los huéspedes a vivir una experiencia ecológica, donde se maximice la eficiencia en la utilización de recursos no renovables. De este modo, se logró construir un hábitat responsable a las necesidades humanas en condiciones saludables, sostenibles e integradoras.
El proyecto fue pensado como ampliación de unas instalaciones ya existentes, integrándolas con pasarelas de madera delicadamente construidas. Las piezas de las cabañas se construyeron sobre elevadas del terreno mismo, permitiendo el paso de la propia vegetación. A partir de dicha circunstancia, las instalaciones y el aire acondicionado fueron desarrollados bajo nivel de plataformas, manteniendo la humedad natural.
Las habitaciones, con dos camas matrimoniales y hall-escritorio de recepción, en contacto directo con las galerías y el yacuzzi, se abren hacia el exterior. Los baños, como núcleos húmedos, se encuentran en relación directa con las habitaciones y la selva, facilitando la experiencia de encuentro con el entorno natural.
En el vacío de las noches de la selva, La Cantera desaparece no dejando rastro. Su esencia, las luces y la calidez de la madera, aparecen como linternas allí donde el silencio se apodera.
Año: 2011
Tipo: Proyecto y dirección técnica
Superficie: 2200 m²
Ubicación: Iguazú, Misiones, Argentina.





